miércoles, 5 de noviembre de 2014

Post blues



Con raíces en el rock progresivo, el krautrock alemán o la música experimental, el post-rock  surgió en los noventa. No siendo nítidos los cánones que abarca el término,  como es previsible, casi todos los metidos en el saco reniegan con vehemencia de su inclusión en el movimiento. Yo de música no sé nada más allá de que hay música que me gusta y otra no, pero me huelo que encontrar un motivo para extender una canción ad infinitum con el raca raca y  el previsible crescendo de ruido con o sin explosión extática final, más parece truco de tahúr. Lo bueno es que con cuatro canciones ya  tienes un disco, un doble si me apuras. Tampoco hay que obviar el repelús que da ese aire intelectualoide que se dan o pretenden darse algunos de estos seres mustios y trascendentales. A todos nos ha pasado: cuando eres chaval, quieres, tienes que ser interesante. Lo malo es si no se te pasa con la edad.

Sin embargo, a pesar de todo, reconozco que vuelvo a ellos de vez en cuando, cuando a veces me lo pide el cuerpo o el espíritu, vete tú a saber. Por el blog ya han pasado gente como Mogwai, God is an Astronaut o Sigur Ros. Cuando en tiempos iba a conciertos -iba a poner "muchos" pero el determinante no es necesario para ser preciso-, alguna de estas bandas, para la que a veces hay que ponerse tapones en los oídos por el insoportable volumen, me hicieron pasar muy buenos ratos. Supongo que también potenciaría su efecto las cervezas. Los canadienses Silver Mount Zion y Godspeed Black You Emperor comparten miembros. A estos últimos los vi una noche de domingo en el Café Antzokia de Bilbao y casi me quedo dormido tirado en el suelo en el piso de arriba. Tengo excusa: por la mañana había corrido el maratón por lo que no era la noche más propicia.

Vale.

2 comentarios:

Lou Rambler dijo...

Bueno, bueno, antes tenía los mismos reparos que tú con respecto al minutaje de los temas,pero ya se me ha pasado.. Cada estilo tiene sus tiempos, la cosa es que te guste o no... Dentro del metal los temas largos, con largos desarrollos y diferentes fases es de lo más habitual... y no me molesta, algunos me encantan. Por supuesto que puede haber imposturas o poses... pero no creo que sea así en la mayoría de casos. Por cierto, a mí nunca me gustó Mogwai, recuerdo que la primera vez que escuché Rock Action me pareció un timo... "así cualquiera hace un disco", pensé...
Saludos

Atalanta dijo...

Hola, Lou. No, si yo los disdruto y tengo mis temporadas de esta gente; hay veces que te lo pide el cuerpo, como a veces el jazz o la música clásica y parece que no querrás otra cosa en la vida pero al final siempre cambias de apetitos. El porqué es un misterio. Pero sí es verdad que aunque la gozo, a veces me digo, joer, esto es un poco trampilla, pero me lo creo :). De Mogwai, no llegué a enamorarme de verdad de ningún disco pero tengo el recuerdo de "Mogwai fears Satan" en Sonorama a última hora, con bastantes más cervezas de las acosejables y gozando como un enano. Después hay una pieza que parece menor, "San Pedro", que a mí me parece una canciocaca terrible... mira, y que ahora mismo voy a escuchar.